Mi vida puede ser muy aburrida. Puede carecer por completo de encanto y emoción. Puede ser una discusióne steril entre que es pop y que es kitsch. Puede ser un chico que arregla para verme un día y nunca llega. `Puede ser un viernes con sabor a lunes en el que el contexto y el concepto se confunden hasta ser completamente inseparables.
Pero supongo que esa es la mano con la que me toca jugar. No pude espiar las cartas y no me dejaron mezclar. Y eso de irme al maso no me cierra.
En el paño la mano se pone pesada. Todos quieren ser la reina de corazones en mi juego. Todos quieren decirme cómo debería ser mi manera de pensar. O nadie quiere decir nada porque saben que muerdo como los perros y araño como los gatos cuando me hacen enojar.
Igual sigue siendo viernes con gustito a lunes. Con gustito a "otra vez" y a ex novios que encuentran al amor de su vida cuando te dejan a vos. Cosas que pasan. C'est la vie, dicen por ahí. Y me voy poniendo colorada hasta estallar en mil pedazos. Quiero saber qué se siente estar completa. Quiero una construcción fuerte, un puente a Razón, un mapa del tesoro con principe azul incluido. Quiero a mis hijos muertos, y a mis abortos en mis bolsillos. Quiero mi cocktail de drogas dulces y arena en los pies.
Quiero que sepas que lo que me está rompiendo viene crepitando por debajo de la alfombra desde que desaparecieron los límites. Uno se va columpiando todo el tiempo entre el exceso de frenos y el avasallamiento atemporal. Y jamás encuentra el punto medio de cocción de las ideas. Jamás se van las sombras de al lado de la luz.
Te voy a robar este momento para que todo tenga sentido en estas palabras. Voy a ignorar tu desprecio de nene nuevo con risa atómica y pecas en la frente. Si solo pudiera abrirme para mostrarte que adentro estoy podrida. Quiero obligarte a que me des este momento como propio, a que la omisión me libere en la causa, a que la pared sea de tiza y tus intenciones de chocolate con leche.
serotonine is the key.
Pero supongo que esa es la mano con la que me toca jugar. No pude espiar las cartas y no me dejaron mezclar. Y eso de irme al maso no me cierra.
En el paño la mano se pone pesada. Todos quieren ser la reina de corazones en mi juego. Todos quieren decirme cómo debería ser mi manera de pensar. O nadie quiere decir nada porque saben que muerdo como los perros y araño como los gatos cuando me hacen enojar.
Igual sigue siendo viernes con gustito a lunes. Con gustito a "otra vez" y a ex novios que encuentran al amor de su vida cuando te dejan a vos. Cosas que pasan. C'est la vie, dicen por ahí. Y me voy poniendo colorada hasta estallar en mil pedazos. Quiero saber qué se siente estar completa. Quiero una construcción fuerte, un puente a Razón, un mapa del tesoro con principe azul incluido. Quiero a mis hijos muertos, y a mis abortos en mis bolsillos. Quiero mi cocktail de drogas dulces y arena en los pies.
Quiero que sepas que lo que me está rompiendo viene crepitando por debajo de la alfombra desde que desaparecieron los límites. Uno se va columpiando todo el tiempo entre el exceso de frenos y el avasallamiento atemporal. Y jamás encuentra el punto medio de cocción de las ideas. Jamás se van las sombras de al lado de la luz.
Te voy a robar este momento para que todo tenga sentido en estas palabras. Voy a ignorar tu desprecio de nene nuevo con risa atómica y pecas en la frente. Si solo pudiera abrirme para mostrarte que adentro estoy podrida. Quiero obligarte a que me des este momento como propio, a que la omisión me libere en la causa, a que la pared sea de tiza y tus intenciones de chocolate con leche.
serotonine is the key.
<< Home